En la última sesión ordinaria (27 de mayo), un grupo de vecinos increpó a los concejales del oficialismo por la aprobación de un convenio entre el municipio y la Nación que plantea la realización de un estudio de prefactibilidad en el marco del proyecto que pretende ampliar el parque industrial La Cantábrica en terrenos del ferrocarril, en Haedo.
“Es grave el estado de toxicidad y se puede ampliar más. El Arroyo Morón tenemos que recuperarlo, porque los vuelcos industriales van a parar allí. Decimos que no debía tratarse el proyecto. Y darle cumplimiento a la ley de ordenamiento territorial. Tener más espacios verdes para salud de la población. De todas maneras lo defendieron a rajatabla”, se quejó Marta Ferreri, de la agrupación de Vecinos Autoconvocados de la Plaza Echeverry.
El convenio no fue apoyado por los bloques GEN, que cuestionó el proyecto, y ARI, que pidió pasarlo otra vez a comisiones, pero recibió los votos de Nuevo Encuentro, FPV y Unión Pro. Los vecinos habían parado la sesión y después de la votación rompieron en insultos el ámbito deliberativo. “En un momento dado todos los vecinos entendimos que iba a haber una charla más amplia. Nos quedamos y observamos que igual lo votaron, entonces nos descontrolamos un poco. Le dijimos mentirosos”, relató la mujer, entrevistada por PdE.
Para la organización ecologista, que marchó en apoyo de otros vecinos linderos a La Cantábrica, sostuvo que “no existen las industrias no contaminantes”.Y agregó: “Sabemos que tiene que haber industrias y un costo ambiental, pero no en zona urbana”. Por su parte, la titular de la bancada oficialista, Florencia De Luca, contó al programa que “lamentablemente fue una sesión bastante atípica”. “Los vecinos se presentaron muy tensionados. Lo que hubo fue una desinformación por parte del concejal del GEN que dijo cosas mentirosas. Lo que aprobamos fue hacer un estudio de impacto ambiental. Siempre hemos garantizado los espacios de participación”.
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